- Editorial:
- GRUPO ANAYA
- Año de edición:
- 2002
- ISBN:
- 978-84-206-4524-7
- Páginas:
- 232
- Encuadernación:
- Otros
- Colección:
- ALIANZA EDITORIAL
COCINA CHARRA
PLAZA MAYOR DE LA GASTRONOMÍA SALMANTINA
NUÑEZ MATEOS ELISA Y GONZALEZ MARTIN ELISA
Los charros son los habitantes de una extensa zona del Transtormes camino de Portugal que, aunque hace tiempo abandonaron el lenguaje lígrimo que
enriquecía con giros originales el castellano, siempre se resistieron a
despe-dirse de los suculentos sabores de sus lumbres, fogones y cocinas
económicas alimentadas con carbón, cisco, leña, carrascos o dura madera de
encina, en los que los pucheros dormían aquella siesta ardiente durante
horas y horas para transformar unos modestos alimentos en auténticos
manjares de príncipes. Elisa Núñez investiga, saca a la luz y traduce al
lenguaje de hoy una serie de recetas de cocina perdidas en el tiempo o
simplemente silenciadas. Arturo González nos ofrece en un delicioso
abecedario de la cocina charra... y otras suculencias una serie de pistas
para ser amplidas por gastrónomos y todos aquellos que busquen fuentes con eco.
Al fuego de la leña de encina se arrimaban las ollas y pucheros del yantar
diario. Aquellos cocidos de garbanzos hechos a fuego lento durante las
interminables mañanas rurales. Un cocido compuesto por los pequeños y relucientes garbanzos de Pedrosillo el Ralo o de Gomecello, el tocino recién
cortado de las grandes hojas, el trozo de gallina, el morcillo (si había
«posibles») y el relleno son su miga, su huevo revuelto y el perejil. En
torno a la camilla se reunía la familia y comían el cocido, comenzando por
la sopa, todos en un plato y así, en el camino, se batían las cucharas para
lograr atrapar la mejor parte. Después, cuando vinieron tiempos mejores cada comensal ocupaba la parcela de su plato y una mano justa repartía las
viandas y evitaba los duelos.